“Si amamos a Dios sobre todas las cosas, inmolémonos por Él. Si amamos al prójimo como a nosotros mismos, démosle la Fe, nuestro mayor Tesoro” – Plinio Corrêa de Oliveira
Palabras del Director
Nº 207 - Marzo de 2019 – Año XVIII
La devoción a San José, esposo de la Virgen y padre nutricio de Jesús, ha estado desde siempre muy arraigada en el pueblo peruano.
El poder de San José
Tomé por abogado y señor al glorioso San José y me encomendé mucho a él. Vi claro que, tanto de esta necesidad como de otras mayores, de perder la fama y el alma, este padre y señor mío me libró mejor de lo que yo lo sabía pedir.
Grandezas y glorias de San José
En una aparición a santa Margarita de Cortona (1247-1297), Nuestro Señor le recomendó: “Manifestad cada día, con un tributo de alabanza, vuestra respetuosa devoción a la bienaventurada Virgen María y a San José, mi padre nutricio”
¿Puede el hombre prever los acontecimientos?
Por ser “La Palabra del Sacerdote” una de las columnas más apreciadas de Tesoros de la Fe, con el fallecimiento del recordado Mons. José Luis Marinho Villac la dirección de la revista Catolicismo [que publica originalmente esta columna] me pidió que le diera continuidad, respondiendo a las consultas hechas, en su mayoría sobre temas religiosos.
El amor a los hijos
Hay que amar mucho a los hijos: para consentir en tenerlos, para no molestarse con sus exigencias y, para llegar en ese cariño a lo sobrenatural.
Europa rehén del Islam
La mujer católica pakistaní Asia Bibi permaneció presa por casi diez años, bajo la acusación de blasfemia contra Mahoma, crimen penado con la muerte en el país. El pasado mes de octubre la Corte Suprema pakistaní la declaró inocente, y su drama parecía haber llegado a su fin. Pero no fue lo que ocurrió.
Distinción, pompa y religiosidad
En este retrato vemos al zar de Rusia Nicolás II y a la zarina Alejandra, que fueron cruelmente ejecutados junto con sus hijos por los comunistas, en la madrugada del 17 de julio de 1918.
+1537 + Venecia. Fundador de la Congregación de Somasca para atender huérfanos, mujeres perdidas y niños abandonados, se tornó famoso por los milagros que operó en vida. Murió de la peste que contrajo cuidando de los infectados.
+(1831-1893) Perú. Militar y político, natural de Arequipa. Heredó de su tío, José Manuel de Goyeneche y Barreda, el título de conde de Guaqui y, por su matrimonio con María del Carmen Azlor de Aragón e Idiáquez, se convirtió en duque consorte de Villahermosa y Grande de España. “Miembro de una ilustre familia de origen navarro. Su abuelo se trasladó a Perú, donde hizo gran fortuna como minero y agricultor. […] Tuvo una educación esmerada e ingresó en el ejército, donde llegaría a alcanzar el grado de coronel”. En la política peninsular destacó en las filas conservadoras, como senador del Reino por derecho propio distinguiéndose por la convicción y el entusiasmo con que defendió los intereses católicos.