Plinio Corrêa de Oliveira LA REVOLUCIÓN ANTICRISTIANA es eximia en deformar a los ojos de la posteridad la verdadera fisonomía moral de los santos. Hubo un tiempo en que, para ello, se servía de la injuria y de la mentira. Falsificando directamente los hechos históricos, intentaba denigrar a éste o aquél santo, para así atacar a la Iglesia. Pero la contraofensiva victoriosa de los historiadores católicos desmoralizó esta estrategia. Se aplicó después una táctica diferente: la unilateralidad histórica. San Vicente de Paul fue atacado de modo especial por este procedimiento. Así, poniendo en relieve la caridad —verdaderamente angélica de este santo admirable—se procuró ocultar su intrépida e inflexible combatividad contra el jansenismo. Pues resulta que la combatividad de los buenos es una virtud que la Revolución se empeña particularmente en evitar que los fieles la conozcan y practiquen. Por ello trata de silenciarla en la vida de los santos. El éxito de esa maniobra es patente: el número de los que han oído hablar de las luchas de San Vicente contra el jansenismo es muy pequeño… Hoy en día, se ha propagado en muchos ambientes el deseo de realizar una transformación igualitaria en la Iglesia. No se trata de vender estos o aquellos tesoros para socorrer excepcionalmente a necesidades de emergencia de los pobres. Se trata, eso sí, a título definitivo, de modificar el aspecto de las funciones litúrgicas y del arte sacro. Nada de ricos ornamentos, de relicarios valiosos, de lujosos edificios sagrados, como los antiguos palacios episcopales, por ejemplo. Esto no cuadra, dicen, con la caridad evangélica. Mejor destinar todo el dinero para los pobres. Como es sabido, la pobreza en Francia era frecuente, en la época de San Vicente. Éste no sólo obtuvo y distribuyó una cantidad inmensa de limosnas, sino que movió a muchos miembros de la nobleza y de la burguesía a visitar a los pobres, ayudándolos no apenas con dinero, sino con asistencia moral. Sin embargo, el santo usó para el culto paramentos espléndidos, verdaderamente regios. La primera foto muestra una riquísima casulla que perteneció a San Vicente de Paul, y se encuentra hoy en el museo Arzobispal de Lyon. El grabado siguiente (Visiter les Malades, ABRAHAM BOSSE, 1635 – Museo Carnavalet, París) representa la visita a un enfermo pobre, hecha por personas de relevancia social, costumbre que tanto estimuló el santo. Se manifiestan así dos aspectos armónicos de un alma admirable.
|
Pedro esta aquí |
Los Reyes Magos y algunos pastores Grandes y pequeños junto a la cuna del Niño Jesús. Quiso la Providencia que el Niño Jesús recibiera la visita de tres sabios —que según una venerable tradición eran también reyes— y algunos pastores. Precisamente los dos extremos de la escala humana de valores. Porque... | |
¿Cómo atraer multitudes como ésta? Qué bueno sería si igual cantidad de personas se reuniera a propósito de la Religión, para un acto público de culto, un gran sermón. Y de ahí fluye naturalmente la gran cuestión: ¿qué medio moderno encontrar, qué técnica nueva usar, para atraer tan enormes conglomerados humanos? ¿Cómo atraer a una manifestación católica el mar de gente que figura en la fotografía de esta página?... | |
San José, Patrono de la Iglesia Esta fue la mejor estampa de San José que conocí en mi vida. Se trata claramente de una pintura ejecutada por alguien que interpretó bien el papel de San José, y que lo supo expresar en una obra artística de buena calidad... | |
Confort físico - Bienestar moral Comparar es uno de los mejores medios de analizar. Si queremos pues analizar nuestra época, es legítimo que la comparemos. ¿Y con qué? Con el futuro, todavía incógnito, es imposible... | |
El vendaval igualitario conduce al materialismo El marqués de Espínola, comandante de las valerosas tropas de Felipe IV, recibe de manos de Justino de Nassau, en Breda, las llaves de la ciudad, que capitula después de una resistencia intrépida... |
Promovido por la Asociación Santo Tomás de Aquino